El presupuesto municipal de 2009 ha quedado aprobado tras el plazo de un mes transcurrido desde ayer 22 de enero a las 24:00h, sin que se haya presentado una moción de censura, que habría paralizado su aprobación, debido a la presentación del presupuesto al Pleno vinculado a una cuestión de confianza, el pasado 22 de diciembre de 2008.

La alcaldesa de San Javier Pepa García ha mostrado su satisfacción por la aprobación de las cuentas municipales “ya que los principales beneficiados son los vecinos de San Javier puesto que la prórroga de presupuesto anterior el pasado año, y la paralización del actual por los grupos de la oposición, imposibilitaba acometer los proyectos y obras que ahora se podrán realizar, y que supondrán una mejora en la calidad de vida de nuestros vecinos”.

El concejal de Hacienda, José Ángel Noguera ha señalado que la aprobación del presupuesto “implica poder ejecutar los 10,5 millones de euros que contempla el capítulo de inversiones”, entre las que ha destacado la construcción de una Guardería en Santiago de la Ribera o un colegio en San Javier, así como la dotación de nuevo mobiliario a la biblioteca municipal, la remodelación del parque Almansa, o un largo listado de obras que mejorarán los servicios públicos en todas las pedanías del municipio.

El presupuesto municipal para 2009 asciende a 49.753.850,94 euros, 4,5 menos que el anterior debido fundamentalmente a la bajada prevista en el Impuesto sobre Construcciones, o la rebaja aprobada por el Pleno en el Impuesto de Bienes Inmuebles, con el fin de paliar la subida anual prevista por la última revisión catastral, de forma que para que el ciudadano no sufra dicha subida el Ayuntamiento dejará de ingresar 3 millones de euros.

El edil de Hacienda, José Ángel Noguera ha explicado que la actual situación de crisis está muy presente en el espíritu de este presupuesto que nos obliga a un riguroso control tanto de los ingresos como de los gastos. En este capítulo se impone la austeridad y un férreo control que ha llevado a adoptar algunas medidas de ahorro, algunas de ellas drásticas como suprimir para 2009 todos los festivales excepto el Festival Internacional de Jazz, y el Festival Internacional de Teatro y Danza.