Sin el viento, que amenazaba el día, y con un radiante sol de invierno, la imagen de San Blas ha recorrido a hombros los dos kilómetros que separan la iglesia de Santiago Apóstol de la ermita donde ha entrado entre aplausos al son del himno nacional.
Seguido por el alcalde de San Javier, Juan Martínez y el resto de autoridades civiles y militares, vecinos y visitantes devotos del Santo benefactor de las enfermedades de garganta, la imagen de San Blas dejaba atrás el Mar Menor porteado por miembros de la Hermandad de Santiago y San Blas, para adentrarse en la pinada que rodea la ermita.
La Rondalla Santiago Apóstol ha cantado la misa huertana celebrada a la llegada del Santo, al término de la cual Carmen Romero Moya recibía el título de Romera del Año.
Mientras tanto comenzaban a encenderse los fuegos con los que las peñas cocinan sus barbacoas y paellas, repartidos por la pinada, como la paella gigante que ya se cocinaba a ojos del público. Los romeros llegaban a primera hora de la mañana para instalar sus "campamentos" dispuestos a disfrutar de un día de romería en el que no falta la feria y los típicos puestos de esta fiesta multitudinaria declarada de Interés Turístico Regional.