El director del Centro Superior de Estudios de la Defensa Nacional se presentó como “uno de la Ciudad del Aire” en el pregón con el que anoche inauguró las fiestas de San Javier
El Teniente General Rafael Sánchez Ortega inauguró anoche las fiestas patronales de San Javier con un emotivo pregón en el que se definió como “uno de la Ciudad del Aire” recordando su infancia en la colonia militar donde nació hace 59 años y donde se despertó su vocación militar. El actual director del Centro Superior de Estudios de la Defensa Nacional recordó lugares, vivencias y nombres propios que marcaron sus primeros recuerdos de un municipio que tantas veces ha sobrevolado como piloto y profesor de vuelo, durante una de sus etapas en su larga y exitosa carrera militar en el Ejército del Aire.
Hijo de padres cordobeses, llegados a San Javier por un traslado en la carrera militar de su padre, Rafael Sánchez Ortega elogió la hospitalidad y generosidad de los vecinos de San Javier. El pregonero alabó el municipio “cuyo nombre he llevado por medio mundo” y no se olvidó del Mar Menor “ahora enfermo por lo que pido a Dios y a los hombres que sea por poco tiempo”. También se acordó de José María Guindano, el vecino de Javier, Navarra, fallecido recientemente, que fue uno de los artífices del fructífero hermanamiento entre San Javier y el pueblo del Santo en cuyo honor se celebran las fiestas.
Acompañado por el alcalde, José Miguel Luengo, el concejal de Festejos, Pedro López y las candidatas juveniles e infantiles a reinas de las fiestas patronales, Rafael Sánchez Ortega fue el encargado de lanzar el Chupinazo que inauguraba las fiestas, dando paso a una actuación musical que junto con la barra instalada por las peñas festeras animó la primera madrugada festiva de un programa que se prolongará hasta el 11 de diciembre.