Dos personas han sido detenidas como presuntas autoras de los delitos continuados de estafa y falsedad documental
Dos colaboradores, personas indigentes que facilitaron tarjetas de telefonía a su nombre para ocultar la identidad de los detenidos, han resultado investigadas
El cabecilla del grupo criminal, con un abultado historial delictivo y actualmente en prisión por delito de homicidio, era el encargado de persuadir a los potenciales clientes para que abonasen el alquiler de inmuebles inexistentes
La Guardia Civil de la Región de Murcia ha desarrollado en San Javier la operación 'Frauzen', una investigación iniciada en marzo de 2018, para esclarecer una serie de estafas inmobiliarias, que se ha saldado con la desarticulación de un grupo criminal, dos de cuyos miembros han sido detenidos y otros dos han resultado investigados, todos ellos como presuntos autores de los delitos continuados de estafa y falsedad documental.
El líder del clan familiar, con amplia experiencia en delitos de estafa, ingresó en prisión poco después de la cometer los delitos ahora esclarecidos, para el cumplimiento de una condena por homicidio.
La investigación se inició en marzo de 2018, cuando la Guardia Civil investigaba la denuncia presentada por un ciudadano sobre una estafa en el alquiler de un inmueble en San Javier. El perjudicado, después de abonar el importe correspondiente al primer mes y la fianza, averiguó que la dirección del inmueble se correspondía con la de un solar.
Una segunda perjudicada relató hechos similares después de haber alquilado una vivienda inexistente, por la que también pagó un primer mes y la fianza.
En ambos casos, el arrendador se había ganado la confianza de sus clientes, de tal forma que, sin mostrarles las viviendas y valiéndose de contratos de arrendamiento simulados, los convenció para que hiciesen el pago.
Desde ese momento, investigadores de la Guardia Civil establecieron una primera línea de investigación centrada en averiguar la identidad del sospechoso y su modus operandi, hasta detectar que las supuestas viviendas se anunciaban en una conocida plataforma digital, junto a otra decena de inmuebles supuestamente ubicados en la Región de Murcia y en la provincia de Alicante.
Estas primeras indagaciones permitieron conocer que detrás de estas publicaciones se encontraban dos hermanos, cuyo padre contaba con un amplio historial delictivo por delitos de estafa.
La Guardia Civil averiguó que los anuncios se habían realizado desde dispositivos de telefonía móvil, cuyos titulares eran personas ajenas al grupo familiar.
Captaron a varios 'gorrillas' para obtener tarjetas prepago de telefonía
De forma pormenorizada, los investigadores averiguaron que se trataba de personas sin recursos, algunas de las cuales fueron captadas mientras realizaban tareas de aparcacoches en la vía pública. Por no más de 10 euros, compraban y entregan las tarjetas prepago a los hacedores de la estafa.
Según avanzaba la investigación, se conoció que, en apenas unos días, los anunciantes habían recibido cientos de llamadas de potenciales clientes, con algunos de los cuales acordaron un encuentro para materializar el alquiler.
En distintas pedanías de Murcia, era el cabecilla del grupo quien se presentaba a las citas. Al parecer, su amplia experiencia delictiva servía para que los futuros inquilinos se convencieran de la idoneidad de la operación sin mostrarles siquiera las viviendas.
Recientemente, después de obtener todos los indicios necesarios, la Guardia Civil ha culminado la operación 'Frauzen' con la desarticulación de un grupo criminal, de índole familiar, formado por un padre y sus dos hijos.
Estos dos últimos han resultado detenidos como presuntos autores de los delitos continuados de estafa y falsedad documental, mientras que dos de sus supuestos colaboradores han resultado investigados.
Se da la circunstancia que el líder del grupo familiar, en el momento de esclarecerse los delitos, se encontraba en prisión cumpliendo una condena por delito de homicidio.
Las personas detenidas e investigadas, las pruebas obtenidas y las diligencias instruidas han sido puestos a disposición del juzgado de Instrucción número 4 de Murcia.