La maquinaria ha iniciado hoy las labores de demolición de las 12 plantas del edificio Lagoymar, el hotel nunca llego a terminarse en La Manga del Mar Menor y que dentro de tres meses, plazo máximo para la ejecución de las obras, habrá pasado a la historia. “Hoy es un día importante para La Manga”, ha señalado el alcalde, José Miguel Luengo, junto al edificio que lleva inacabado desde 50 años cuando se inició su construcción en el kilómetro 7 de La Manga.
“Después de muchos años de trabajo, el Ayuntamiento de San Javier procede a ejecutar de manera subsidiaria la demolición con una inversión de un millón de euros ya que el propietario no ha atendido los requerimientos del Ayuntamiento”, añadió el alcalde, José Miguel Luengo que afirmó que “el Ayuntamiento no podía permanecer impasible” ante la situación del edificio que además de degradar la zona está declarado en ruina.
El responsable de demoliciones de la empresa encargada de las obras Urcotex Inmobiliaria, Toni León Fernández explicó que dadas las características del edificio, en ruinas y cercano al Mar Menor, la demolición se realizará exclusivamente de manera mecánica, ya que, además, el peligro de colapso impide que sea manual. Los trabajos comenzarán de fuera hacia dentro y de arriba a abajo iniciándose por la alas del edificio, primero la torre sur, después la norte y la oeste, que es la más expuesta, la última. El escombro generado que se estima en más de 85.000 metros cúbicos se clasificará y buena parte se utilizará para rellenar toda la huella del edificio dejando un solar, de unos 20.000 metros cuadrados, totalmente limpio, calificado como de uso hotelero.
La desaparición del edificio contribuirá a impulsar y regenerar estéticamente la zona, señaló el alcalde, José Miguel Luengo que recordó la cercanía del que fue edifico gemelo y actualmente el hotel más grande de la Región, el hotel Doblemar, además del renovado parque de Bomberos, y la futura renovación de las galerías comerciales ubicadas enfrente, en una zona, la del kilómetro 7 de La Manga, que cuenta desde el verano pasado con un nuevo aparcamiento disuasorio.
“Hoy es un día de enhorabuena sobre todo para los vecinos de La Manga que ya no tendrán que seguir viendo esta imagen”, señaló el alcalde que estuvo acompañado por gran parte de los concejales del equipo de Gobierno, y el alcalde pedáneo José Guerrero. José Miguel Luengo agradeció la labor del concejal de Urbanismo, Antonio Martínez “un manguero que ha capitaneado esta operación” y subrayó la gestión realizada por el equipo técnico y jurídico del Ayuntamiento de San Javier “a los que quiero felicitar y agradecer que su tesón en un procedimiento que ha sido complejo y hasta farragoso, pero que hoy comprobamos que ha merecido la pena”.