El alcalde, José Miguel Luengo y la concejala de Derechos Sociales, María del Mar Pérez, han acompañado hoy a la consejera de Política Social, Familias e Igualdad , Conchita Ruiz, en una visita a la Residencia Escolar de Aidemar, que se ha convertido en el primer centro residencial de la Región de Murcia destinado exclusivamente a menores con discapacidad y trastorno grave del espectro autista.
El centro, gestionado por Aidemar, acoge en la actualidad a nueve usuarios diagnosticados de graves problemas de conducta y trastorno del espectro autista, con edades comprendidas entre los 12 y 18 años, explicó Francisco García, presidente de Aidemar, que los acompañó durante la visita. Los usuarios, que viven los siete días de la semana en el centro, reciben atención personalizada, de 22 profesionales, durante las 24 horas del día, los 365 días del año. De lunes a viernes acuden al Centro Concertado de Educación Especial, de Aidemar.
El centro, propiedad de Aidemar, ha sido rehabilitado y acondicionado a través de una subvención de la Comunidad Autónoma que ha destinado 375.496 euros del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia Next Generation. El edificio ocupa una parcela de 5000 metros cuadrados y una construcción de 500 metros en la que se han habilitado dos viviendas independientes para 5 y 4 personas, con otras dependencias funcionales. Asimismo cuenta con una amplia zona exterior con zonas ajardinadas para ocio y deporte, una piscina, huerto, pérgola y vestuarios.
La consejera, Conchita Ruiz detalló que se trata de una vivienda alternativa a la habitual con diez plazas y donde los residentes realizan actividades terapéuticas y socioeducativas complementarias al Centro de Educación Especial”. La consejera resaltó que este servicio ofrece estancias temporales a las personas con discapacidad y alteraciones de conducta “con la seguridad de que será atendida con todas las garantías y cuidados que necesita y dentro de un ambiente acogedor que promueve su bienestar emocional”.